El marco de la política climática y energética en España está determinado por el contexto internacional y la política de la Unión Europea. En éste destaca el Acuerdo de París alcanzado en 2015 y cuyo objetivo es contener el aumento de la temperatura media global por debajo de los 2°C respecto de los niveles existentes antes de la revolución industrial, y realizar esfuerzos para limitarlo a 1,5°C. La UE ratificó el Acuerdo en octubre de 2016 (lo que permitió su entrada en vigor en noviembre de 2016) y España lo hizo en 2017. Con la entrada en vigor del mencionado Acuerdo se dio un nuevo impulso a las políticas energéticas y de cambio climático.
¿Qué es el PNIEC 2021-2030?
El Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) 2021-2030 define los objetivos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, de penetración de energías renovables y de eficiencia energética. Determina las líneas de actuación y la senda más adecuada y eficiente, maximizando las oportunidades y beneficios para la economía, el empleo, la salud y el medio ambiente, minimizando los costes y respetando las necesidades de adecuación a los sectores más intensivos en CO2.
El texto del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima enviado el 31 de marzo de 2020 a la Comisión Europea coincide con el que se sometió a fase de consulta pública del Estudio Ambiental Estratégico (EAE) del Plan y que fue remitido a Bruselas en enero de 2020 como borrador actualizado: https://www.miteco.gob.es/images/es/pnieccompleto_tcm30-508410.pdf. Con esta comunicación a la Comisión Europea, España da cumplimiento al Reglamento (UE) 2018/1999 del Parlamento Europeo y del Consejo de 11 de diciembre de 2018 sobre la gobernanza de la Unión de la Energía y de la Acción por el Clima.
El documento se modificará –y, en su caso, se remitirá nuevamente a Bruselas– en aquellos aspectos que pudiera resultar necesario tras la finalización del proceso de evaluación ambiental y el análisis de la totalidad de las consultas recibidas. La fase de información pública debía haber concluido el 25 de marzo de 2020 y, en la actualidad, está suspendida en aplicación del Real Decreto 463/2020, de 14 de marzo, por el que se declaró el estado de alarma.
¿Cuáles son los objetivos del PENIEC 2021-2030?
El objetivo de España a largo plazo es convertirse en un país neutro en carbono en 2050 (cero emisiones netas de GEI), para lo que se ha fijado el objetivo de lograr una mitigación de, al menos, el 90% de las emisiones brutas totales de GEI respecto al año de referencia 1990.
Las metas establecidas en materia de reducción de GEI en este Plan Nacional no solo cumplen con los objetivos vinculantes establecidos en la normativa comunitaria, sino que elevan la ambición, contribuyendo a la consecución del objetivo de reducción de las emisiones en el conjunto de la Unión Europea, así como a los compromisos internacionales a los que aquella se ha adherido.
Las medidas contempladas en el Plan permitirán alcanzar los siguientes objetivos en 2030:
23% de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) respecto a 1990.
42% de renovables en el uso final de la energía. Cifra que duplica el 20% del año 2020.
39,5% de mejora de eficiencia energética en la próxima década.
74% de presencia de energías renovables en el sector eléctrico, en coherencia con una trayectoria hacia un sector eléctrico 100% renovable en 2050.
Eficiencia energética
1-Transporte
Se propone actuar sobre la movilidad urbana de forma que se consigan cambios importantes en el medio que eligen los ciudadanos para desplazarse, con una mayor participación de los modos más eficientes como el transporte público, la bicicleta o caminar, en detrimento del vehículo privado con baja ocupación y fomentando el uso compartido. Se prevé generalizar en todas las ciudades de más de 50.000 habitantes zonas de limitación al tráfico de los vehículos más contaminantes a partir del año 2023.
Mientras se produce el cambio están previstas ayudas para que los propietarios de vehículos puedan renovar su coche por otro menos contaminante o por vehículos eléctricos, e incluso ayudar a los conductores profesionales a conducir de forma más eficiente. Aprender ciertas técnicas de conducción puede reducir hasta un 10% el consumo de combustible.
2-Hogar
Se da prioridad a la rehabilitación energética del parque edificatorio ya construido, así como a la renovación energética del parque de edificios públicos de la Administración General del Estado y de las administraciones autonómicas y locales. Varios puntos importantes son la mejora de la envolvente térmica de los edificios, la mejora de las instalaciones térmicas como tuberías para disminuir las pérdidas en el transporte de fluidos, y la mejora de los sistemas de control de consumos. En total, se espera renovar las instalaciones térmicas de más de 300.000 viviendas cada año de 2021 a 2030.
Están previstas ayudas públicas para abordar estos importantes cambios, que mejorarán la certificación energética de las viviendas aumentando su valor. Además, el Plan prevé invertir dinero en informar a los ciudadanos sobre los electrodomésticos más eficientes.
Energías renovables:
Los países de la UE decidieron a qué porcentaje de renovables se comprometían para al año 2030, y España se comprometió al 42%. Según ha explicado el Ministerio para la Transición Ecológica, en realidad esta cifra es la que sale después de combinar todas las medidas del conjunto del Plan Integrado de Energía y Clima, interviniendo dos factores en su composición: la instalación de más energías renovables y el efecto de las políticas de eficiencia en el consumo total de energía. Es decir, al bajar el total de energía a generar, el peso de las renovables cobra más fuerza en porcentaje.
Las nuevas plantas de energías renovables producen en España la energía más barata, lo que resulta muy interesante para la economía. De hecho, en el Plan se espera que una parte importante de las plantas contaminantes actuales vayan cerrando por decisiones económicas de las empresas propietarias y dejen paso a las renovables. Para el desarrollo de nuevas centrales limpias se utilizarán las subastas como principal herramienta, dando prioridad a aquellas instalaciones que faciliten una transición energética más justa.
Para conseguir esta revolución de las renovables se pretende que las tecnologías que más aumenten su peso para 2030 sean la eólica y la solar fotovoltaica. Además, el Plan incluye un despliegue masivo del autoconsumo renovable, dado que la autogeneración de electricidad con placas solares en los tejados de viviendas puede ser más económica que las tarifas al consumidor final.
Efectos del Plan en la economía, el empleo y la salud
El PNIEC viene acompañado de un análisis de los efectos macroeconómicos sobre la economía y la industria española, el empleo y la salud pública. La movilización de inversiones, el ahorro de energía y un mix en el que las energías renovables (más asequibles) son las protagonistas, posibilitarán que el Producto Interior Bruto (PIB) aumente en un 1,8% en 2030 respecto a un escenario sin medidas. En concreto, entre los 16.500 y los 25.700 millones de euros.
El empleo neto anual, es decir, los puestos de trabajo adicionales y no acumulables que se crean cada año aumentarán entre 250.000 y 350.000 personas. Se trata de un aumento del 1,7% respecto a un panorama sin las medidas del PNIEC. Las inversiones en renovables generarían entre 107.000 y 135.000 empleos netos al año en 2030; las dedicadas al ahorro y eficiencia energética, entre 56.000 y 100.000 puestos de trabajo; y las de redes y electrificación de la economía, unos 46.000. Indirectamente, el cambio energético creará hasta 118.000 empleos netos en 2030.
Las medidas contenidas en el PNIEC no solo consiguen reducir las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) sino también las de los principales contaminantes primarios asociados con la calidad del aire. La mejora en la calidad del aire del conjunto del país se traduce en una disminución de los daños a la salud en forma de menos muertes prematuras, que se reducen en un 27% sobre un contexto sin medidas.
¿Cómo afecta el PNIEC 2021-2030 a las empresas?
Se prevén medidas y obligaciones para las grandes y pequeñas empresas y para la Administración pública. Una medida que se plantea es que tanto el sector privado como el público impulsen nuevas formas de contratación que tengan en cuenta los ahorros energéticos y las mejoras ambientales.
Pero ¿Cómo verificar que todos estos cambios se aplican? Con la realización de auditorías energéticas, obligatorias para las grandes empresas cada cuatro años por exigencia de la Directiva 2012/27/UE, actualmente Directiva 2018/844/UE, traspuesta en España por el RD56/2016.
¿Cómo podemos ayudarte desde Prysma Consultoría y Tecnología?
Prysma cuenta con profesionales expertos en energía y sostenibilidad que pueden ayudar a tu empresa a contribuir a alcanzar los objetivos del PNIEC 2021-2030. Mediante el cálculo y verificación de la huella de carbono, la realización de auditorías energéticas y la implantación de Sistemas de Gestión de la Energía (ISO 50.001). Con estas opciones, además de potenciar la eficiencia energética de tu empresa y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, verás reducido el coste económico asociado al uso de la energía.
Raquel Perdices Burguete
rperdicesb@prysma.es
Departamento de Energía y Sostenibilidad