Son muchas las empresas que en los últimos años han conseguido grandes avances en conciliación para sus empleados gracias a medidas tan populares como la flexibilidad laboral y el teletrabajo. Pero ¿qué pasará con estos avances si sigue adelante el proyecto del Ministerio de Trabajo a favor de la obligatoriedad de que todas las empresas establezcan un sistema de registro diario de la jornada?
Es cierto que en los últimos años según CC.OO han aumentado el número de horas extras. Según este sindicato son 6,8 millones las horas extras trabajadas donde sólo se compensan con sueldo o tiempo un 56% y se debe trabajar en evitar este fraude.
El proyecto que ha puesto sobre la mesa el Ministerio de Trabajo trata sobre el control diario de la jornada laboral de todos los trabajadores. Según el borrador, “el registro será diario y deberá incluir el horario de entrada y de salida”. El ejecutivo prevé alguna excepción como por ejemplo los comerciales o los transportistas. Una buena idea si se enfoca a controlar abusos en las horas extras no remuneradas, pero con bastantes lagunas en contra de los nuevos modelos de trabajo y de conciliación. Volvemos al debate de siempre, ¿castigo o recompensa? ¿Pasa la solución por castigar a las organizaciones que están fomentando malas prácticas o recompensamos a aquellas que creen de verdad en el trabajo diario a favor de la conciliación?
La Asociación de Multinacionales por la Marca España formada por 37 grupos empresariales como Airbus, Facebook, Huawei, Siemens, Google, Deloitte o Bayer, entre otros, ya han comunicado que este borrador va en contra de sus políticas de flexibilidad laboral.
No existe fórmula universal que satisfaga a todas las personas. De hecho, la Fundación Másfamilia define la conciliación como una práctica que consiste en obtener un equilibrio personal y laboral que depende de las necesidades y las características de cada individuo y de su entorno diario. Medidas a poner en marcha en las empresas pueden ser muchas y muy variadas dependiendo tanto del sector como de las características de la plantilla.
Uno de los modelos de conciliación más valorados en nuestro país, efr, trata políticas que van mucho más allá del control de las horas trabajadas.
El modelo certificable se basa en un Sistema de Gestión que entre otras cosas trata de formalizar las diferentes medidas de conciliación puestas en marcha de manera voluntaria en las organizaciones, agrupándolas en los siguientes grupos:
¿Todas las medidas suponen un coste para la organización? La respuesta es NO. Según la Fundación Másfamilia, más del 50% de las medidas son a coste cero para las empresas. De hecho, las más valoradas por los empleados como las siguientes, suponen un coste mínimo.
- Horarios a la carta (flexibilidad de horarios sin que afecte a la actividad realizada por el trabajador).
- Teletrabajo
- Adaptaciones de jornadas
- Banco de tiempo
- Job Sharing
- Permutas de festivos locales
El director de la Iniciativa efr, Roberto Martínez, ha asegurado que ‘las medidas de conciliación deben ir más allá de la flexibilidad de horarios o de la maternidad y deben enfocarse hacia el desarrollo personal y profesional de nuestros colaboradores, otorgando mayores grados de libertad y con una clara cultura enfocada al cumplimiento de objetivos’.
Medidas ya implantadas en un gran número de grandes empresas y que están sirviendo de ejemplo a Pymes y microempresas y no muy compatibles con el control diario de jornada.
Volvemos a la pregunta anterior, ¿es la solución legislar y concentramos únicamente en regular horarios o nos centramos en fomentar modelos más completos como efr?.