El equipo de seguridad alimentaria compartió con @aenor y su gerente de alimentación, David Verano, una jornada sobre los cambios en IFS.
La organización IFS dedicada a la seguridad alimentaria, ha publicado su norma IFS 6.1., en la que se adapta a las indicaciones de GFSi. Se espera, no obstante que IFS presente una versión totalmente renovada de su norma a finales de este 2018 (la IFS 7.0).
Los cambios afectan a tres campos:
AUDITORIAS NO ANUNCIADAS
La empresa debe de pedirlo al certificador, que hará una auditoria sin avisar en un horizonte de -16/+8 semanas respecto a la fecha teórica.
Las empresas lo demandan por exigencias de clientes (al menos ALDI lo pide de momento, pero en cuanto se conozca más aumentarán las peticiones con seguridad).
ALÉRGENOS
Trata de evitar un abuso del etiquetado precautorio (EPA).
Incide sobre los controles de ausencia de alérgenos y su validez técnica para asegurar la ausencia.
FRAUDE ALIMENTARIO
Es el riesgo de que un proveedor nos defraude por etiquetado fraudulento, dilución, ocultación de defecto, sustitución, mejoras prohibidas, etc., buscando un beneficio económico ilícito, que puede implicar o no riesgos alimentarios.
Requiere un análisis de riesgos (fuera del HACCP) clásico: análisis, evaluación y plan de mitigación y control; así como un nuevo procedimiento o capitulo de manual.
Mas información https://www.ifs-certification.com/index.php/es/standards/2816-ifs-food-es